Algo pasa en las aulas. Lo explica y muestra hoy La Vanguardia, que firma un montaje con una serie de videos de Youtube con algunas de las tropelías de los estudiantes en clase. Tengo varios amigos en el mundo de la educación. Como son de mi quinta, esto es, jóvenes, llevan pocos años lidiando con semejantes animales en las aulas. Por ello, aún no se han pedido bajas ni han colgados las tizas, actitud habitual de muchos docentes hartos de tales actitudes.
El problema es de hondo calado y analizarlo en profundidad requeriría varios posts y una mente más pre-clara que la que firma este escrito. No obstante, alguna de las causas apuntan a la terrible falta de motivación de muchos chavales, la falta de disciplina aplicada en sus respectivos hogares, la pérdida de valor del factor esfuerzo, o la admiración por modelos vacíos (tipo Jade Goody, DEP). También el nivel docente ha bajado: algunos profesores no están capacitados para enseñar, difundir y motivar. La llegada masiva de inmigración ha obligado a ampliar las plantillas de muchas escuelas, dando así pie a que las pruebas de selección de hagan mucho menos exigentes. La rotación de profesores de una escuela a otra tampoco ayuda a asentar dinámicas sólidas de trabajo con los chavales.
De todos estos problemas el que más me preocupa es el de la motivación por conocer. Un colega periodista explicaba hace mucho que se sorprendió como en su clase [de periodismo] casi nadie tenía blog. Yo compartí con él dicha sorpresa, porque consideraba que un formato como éste debería ser obligatorio para todo periodista, puesto que permite dar rienda suelta a lo a muchos nos gusta: expresarnos.
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De reojo: La carga de trabajo estudiantil impide a este Caminante actualizar más.
5 comentarios:
Si hace mucho decía que casi nadie tenía, hoy puedo decir que alguno que otro tiene. Digamos que si antes eran cuatro, ahora son 7 u 8. Quizás el problema sea que en la facultad no se habla de blogs y las posibilidades que ofrece Internet para el periodista. Quizás, si alguien lo explicará a algunos les picaría el gusanillo. Pero bueno, los problemas de la carrera dan para divagar y mucho sobre el tema, y no es a lo que hemos venido aquí.
Saludos y dale fuerte a la vida estudiantil de la capital!
"Alguna de las causas apuntan a la terrible falta de motivación de muchos chavales, la falta de disciplina aplicada en sus respectivos hogares, la pérdida de valor del factor esfuerzo, o la admiración por modelos vacíos"
No podria estar-hi més d'acord. El present ja és prou preocupant, però el que m'inquieta més són les conseqüències que tot això tindrà d'aquí a 10 o 15 anys, quan aquesta generació hagi d'incorporar-se al mercat laboral, tingui fills, etc...
Quelcom pasa a la societat que tot se'n va a norris, no es solament la universitat i els estudiants, que ultimamemt en manifestan per cosses que poc importan a la societat, doncs son mol conformistes. En quant a Bolonya, que et dire son una minoria que no ho vol(?) doncs la immensa majoria ho hi esta d'acord, o "no sabe, no contesta". Tambè val a dir que la majoria de estudiants europeus i esta plenament d'acord.
Com apunt final, els propis estudiants quan es manifestan tindrian que fora la tropa d'antisistema (?) que sel's hi cola i els hi rebenta la protesta.
Yo siempre he pensado que la educación empieza en casa, y que el error de nuestra sociedad es que relegamos toda responsabilidad a los profesores. Estoy muy de acuerdo contigo en que el esfuerzo ya no es un valor a la alza y que esos personajes que mitificamos no nos llevan a ninguna parte.
Sobre los estudiantes de periodismo y en los blogs, aquí en la URJC estoy en una asignatura (troncal) en que se enseña exclusivamente cómo hacer un blog, qué es netvibes, twitter, todo... Lo que pasa es que es una asignatura de 5º, creo que se tendría que impartir en cursos anteriores. Aunque nadie, absolutamente nadie de ellos tenía un blog antes. Mis compañeros de Tarragona, pues unos 5 o 6 también se han apuntado al carro.
En los medios de comunicación se plantea un modelo de éxito personal basado en el talento natural más que en el esfuerzo y la dedicación. La gente ve el resultado de los fenómenos, pero nunca el cómo han llegado allí. Esto nos lleva a pensar que el hedonismo se ha implantado también en las nuevas promociones de padres/madres y profesorado. Es decir, ante unos valores de conrear para conseguir resultados en el futuro, los profesores ahora piensan en el día a día, los padres también y los jóvenes, lo mismo. Antes, sacar buenas notas y llegar a la universidad eran un ascensor social, ahora en España no garantiza nada.
Ante un futuro incierto, el deseo de pensar en él no es importante.
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